Sola
Veía aquel pueblo muerto,
sin nadie por las calles, varias personas miraban desde su ventana, ella,
continuaba caminando sin rumbo, no se acordaba cuanto tiempo llevaba
deambulando por aquel lugar que no conocía de nada.
Miraba a las personas que
estaban en la ventana intentando que alguna de ellas le dijese algo, la llamase
por su nombre, nadie decía nada, solo la miraban asombrados.
Observó cómo un hombre
mayor hablaba por teléfono, al tiempo que la miraba, apuró el paso, sentía
miedo, no sabía lo que estaba pasando, no sabía quién era, ni que hacía allí.
Intentaba estrujar su mente, sin embargo, no recordaba nada de su vida, de su
pasado, de quien era.
Cruzó aquel pueblo, para
adentrarse en una carretera por entre un bosque, parecía sentirse mejor, lejos
de ser observada, se sentó, apretó su cabeza con las dos manos, intentando
saber qué hacía allí, como había llegado y donde estaba su familia, si es que
la tenía.
Desde el momento que se
había despertado en aquel granero, su mente era una laguna en blanco, se sentía
magullada, lastimada, atada, tenía hambre, sed, como pudo se soltó de aquellas
correas, buscó donde beber y comer. La
casa al lado del granero estaba vacía, podía haberse quedado allí, su instinto
le decía que no estaría segura. Dentro
de aquella casa vio fotos, no reconocía a nadie, no conocía ninguna parte de
aquella casa, no entendía lo que estaba pasando, porque los ruidos la
asustaban.
Perdió el conocimiento
allí sentada, al lado de aquella carretera, con los árboles silbando por el
viento y los pájaros cantando.
Se despertó en una cama,
con ropa limpia, con un hombre vestido de blanco, con mascarilla, gafas. Miró a
aquel hombre asustada, él, la tranquilizó, le explicó que era médico, que la habían
encontrado en una carretera, que no llevaba documentación, que estaban
investigando quien era.
Ella, no pudo decirle
nada, no se acordaba de cuál era su nombre, su familia, su hogar.
El médico, tras las
investigaciones pertinentes, le puso en conocimiento que había sido retenida durante
más de un mes, las marcas de sus manos y pies, así lo determinaban, que no
había sido violada, que la habían maltratado física y psicológicamente. Que,
debido a la situación de alerta sanitaria, la habían abandonado en aquel
granero, le explicaba que prácticamente todo el mundo estaba en confinamiento
por un virus que estaba infectado a los humanos.
Permitieron a la familia ir
a buscarla para llevársela a casa, con ellos se sentía protegida, no sabía
porque aquellas personas le daban seguridad, confianza, pensaba que sería un
comienzo para poder recuperar su vida, aunque tenía miedo de recuperar su
memoria y revivir aquel terrible mes.
Una historia muy adecuada para el momento que estamos viviendo, pero a la vez muy triste por lo que le tocó vivir a la protagonista con una secuela muy dolorosa como lo es perder la memoria.
ResponderEliminarEs fácil evadirse conforme lo escribes. Transmites muchísimo las sensaciones y detalles hacen ponerse en la piel.
ResponderEliminarY si, esto me dio taquicardia... espeluznante! Me quedé sin palabras
ResponderEliminarY en su lugar, no sé si preferiría vivir el resto de mi vida sin memoria.
Gracias por el post, cuidate mucho.
¡Hola!
ResponderEliminarObvio que el maltrato físico y psicológico que debió sufrir debió de ser horroroso, pero, y sin que se me mal interpreten mis palabras, creo que lo peor para mí, sería no saber quien soy, no tener ningún recuerdo de mi vida... Eso sí debe ser duro, aunque por otro lado, le permite no recordar ese siniestro mes.
Uns historia, como siempre, que me ha mantenido enganchada.
Pero como creo que me conoces ya.. ahora me falta saber el porqué del secuestro Jejeej (creo que en otra vida debí ser detective, o no me explico esas ganas que tengo de saber más sobre tus historias).
Besotes
Me ha encantado leerte, una historia apropiada para estos días, es triste, pero logras transmitir emociones y eso me gusta, no sé qué sentiría si no tuviera memoria, pero debe ser difícil no saber quién eres, quién es tu familia, etc, no me puedo ver en esa situación. Mantiene enganchada, con ganas de saber más.
ResponderEliminarQué historia mas triste. Pobre mujer, sin memoria, secuestrada, torturada. Y ahora sin saber si quiere sanar o no.
ResponderEliminarQue bello talento tienes, una historia que aunque un poquitín corta me hizo volar la imaginación un montón. Una pregunta, le hicieron la prueba de q no tuviera el virus antes de llevarla a casa? 😅 solo por curiosidad 😘
Dime por favor que no es historia real por que esta....muuuy real..
ResponderEliminarEn el fondo así estamos todos solos y pendientes de lo que pasa al exterior, algunos seguimos sin poder abrazar a nuestras familias, festejar cumpleaños y recorrer las calles que con frecuencia lo hacíamos...
Espero no perdamos la memoria, pero que si ganemos experiencias y recordemos lo que tenemos al lado de los que amamos..
Gracias... genial!!!!
Hola!
ResponderEliminarQué desazón despertarse sin saber quién eres ni lo que ha pasado, que un médico te diga que tú vida ha sido un infierno y tú no te acuerdes... ¿Va a seguir la historia? Porque me he quedado intrigada y enganchada, sobre todo por lo bien ambientada que está en los tiempos actuales.
Besos!!
¡Hola, Mar! Sola, no podrías haber titulado mejor tu relato. No solemos darnos cuenta de que sin memoria no somos nadie, que la memoria nos ha hecho cómo somos y que si la perdemos somos como un lienzo en blanco. Ignoro las razones por las que el personaje perdió la capacidad de recordar, no obstante, es muy probable que fuese fruto del estrés postraumático. Me alegra que dentro de la desazón del relato encontrase un lugar seguro. Un abrazo.
ResponderEliminarOlá!
ResponderEliminarHistória muito interessante, parece um thriller e tem tema para isso.
Boa continuação.
Desejamos muita saúde e uma feliz Páscoa.
Beijinhos
Qué terrible lo que debe haber vivido esta mujer. Lo peor es que tarde o temprano recobrará la memoria y lo va a pasar fatal. Pobrecilla. Ains que quiero saber máas! Podrías poner capitulos jejej
ResponderEliminarBesotes
Hola guapa
ResponderEliminarUff nuestra protagonista de hoy si que lo ha pasado mal, no solo por el maltrato fisico y psicologico que debe haber sufrido mientras estaba privada de libertad, sino tambien por haber perdido sus recuerdos e identidad
Me gusta que el final tenga algo de esperanza
un besaszo
Hola guapa, carai que dureza la de este relato, todo lo que debe haber pasado ella para llegar hast ahi y oye me parece un acierto el titulo, desde luego describe perfectamente la situacion en la que esta! besos
ResponderEliminaruna historia dura, donde se que el maltrato fisico y psicologico que sufre la chica se podria ajustar a nuestros tiempos con el temor y miedo que asola nuestra sociedad.
ResponderEliminarEs duro encontrarse en situaciones de ese tipo, donde el rechazo es enorme que afecta a tu propia salud
Es bueno encontrar a gente solidaria que ayuda a las personas como ese medico
Es un tema que siempre me ha llamado la atención. Como hoy sabes quién eres y qué quieres y mañana tu vida da un giro radical y no recuerdas nada. ME imagino que esas personas nunca recuperarán la confianza, como parece que le pasa a esta chica, bss!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho la historia y la manera que tienes de escribir y engancharnos. Además es una historia muy adecuada a los tiempos que corren.
ResponderEliminarEs una historia muy profunda, es increíble todo lo que puede generarse al vivir diversas situaciones. Sin lugar a duda muchas personas se sentirán identificadas con las emociones y situaciones que transmiten estas palabras.
ResponderEliminarUna historia corta pero muy intensa, reflejando lo que estamos pasando hoy en día con el confinamiento por culpa del virus y, ya siendo una situación difícil para todos, no podría imaginar levantarme sin saber quién soy y lo primero que vea y sepa es que tenemos que estar encerrados por alerta sanitaria.
ResponderEliminarEn pocas frases me has hecho sufrir lo que demuestra tu buen uso de las palabras y sus emociones. Buen trabajo.
Que miedo perder la memoria, dicen que las mujeres estamos más propensas a perder la memoria, pero que hacemos en ese lapso de tiempo sin memoria, y regresar a la vida normal y saber que todo aquellos fue solo motivado por otra conciencia, me ha gustado el relato creo que no está de más leerlo y compartir. De repente recordé personas, lugares y la enfermedad del Alzheimer que es una triste realidad para algunos viven en otra dimensión mientras los "concientes sufren el desvío de la realidad de sus queridos".
ResponderEliminarLa verdad es que aunque a veces deseemos olvidar ciertos sucesos, no tiene que ser nada fácil perder la memoria ya que ella nos ayuda a avanzar a veces a aprender de los errores y otras veces volver a cometerlos. Me han dado escalofríos al leer este relato.
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