La taberna del diablo

 


La taberna del diablo

Los mayas estaban convencidos de que el diablo era un esqueleto con los ojos colgantes. La taberna en la antigüedad se consideraba por su tradición un lugar donde se servían comidas y bebidas. El diablo valoró este tipo de establecimiento como la mejor opción para atraer almas y, poder llenar todos esos espacios vacíos que iban quedando en el averno.

Una tarde cualquiera de un día de verano, con su cuerpo esquelético colgaba el cartel de “Taberna, comidas y bebidas”. No tardó en recibir a los primeros clientes, aquellos que buscaban beber y comer por poco dinero en un paraje apartado, transportistas, motoristas, y alguna que otra familia se paraban porque les resultaba atractivo aquel sitio tan puro y tradicional. Lo que nadie sabía era que lo único que tenía de real el letrero era el de Taberna, puesto que comidas y bebidas era solo un reclamo.

Belcebú hacía negocio con aquellas personas que estaban dispuestas a vender su alma a cualquier precio. Siempre se las apañaba para saber que deseaban y de esta forma se lo ofrecía. Unos ser millonarios, otros un buen coche, una buena casa, mujeres, hombres y un largo etcétera. Algunos tenían deseos incumplidos o simplemente eran avariciosos. Otros sufrían sin poder calmar ese dolor y otros simplemente vagaban por la vida sin valores.

Una tarde de invierno, donde los días eran tan cortos que la luz del sol tenía poco trabajo, y era la luna la que predominaba en el cielo, unas grandes nubes cubrían el resplandor de las estrellas. En un pequeño claro una gran luz iluminó la taberna, delante de la puerta estaba él, alto, muy delgado, erguido, levantó la cabeza mirando hacia la luz y esta parpadeó.

Las nubes comenzaron a moverse de una manera extraña, formando círculos hasta que su color se difuminaba con el del cielo. Miles de estrellas fueron apareciendo mostrando todo su esplendor para agruparse sobre el edificio que albergaba el mal.

Él, simplemente un hombre, estiraba su mano hacia el infinito, abría su corazón para que todo aquel que no apreciase la vida que le había tocado, pudiese albergar esa esperanza tan buscada y a veces la que tanto se necesitaba.

Empujó la puerta y sin tener la necesidad de entrar, dejó que la luz de las estrellas iluminase la negrura de aquellos que no valoraban su existencia, de los que no reconocían que existir tenía consecuencias, unas veces buenas y otras muy malas, alegres o tristes, solitarias o en compañía. Iluminó los corazones de aquellos que creyendo que, el vender su alma les daría la felicidad.

Él era el hombre que sabía lo que era sufrir, era la persona adecuada para abrir el corazón de todo aquel que buscaba respuestas.

Las estrellas convirtieron la taberna en un templo dedicado a la búsqueda del amor, de la paz. Un lugar donde no era necesario venderse para poder conseguir avanzar por el camino de la vida. Un punto donde cualquiera pudiese entrar y salir, un espacio en el que nadie sería juzgado, en el que la libertad sería la decisión. El hogar de puertas abiertas, sin perjuicios, sin valoraciones, simplemente con la idea de buscar en el interior de cada uno aquello que le ayudase a continuar.

Él, era el sol que alumbraría a pesar de los momentos oscuros, penosos, complicados.

Él, deseaba dar alivio a la existencia de todo ser nacido.  

Latabernadeldiablo



Comentarios

  1. Sencillamente PRECIOSO.
    La esperanza... Gracias Mar, abrazo!

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  2. Contra el mal el bien, abierto a todo alivio y esperanza. Un abrazo. Carlos

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  3. Me ha gustado mucho! Siempre la palabra 'taberna' me ha parecido acogedora, siempre he pensado en un lugar decorado en madera donde se sirve bebida y comida, siendo un lugar reconfortante donde te podías sentir como en casa. Así que la palabra y el sentido que siempre ha tenido para mí, se mimetiza con el sentido más que positivo y esperanzador que contiene tu relato. Felicidades. Saludos.

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  4. Si es del diablo, debe ser un buen sitio para tomar unos tragos.

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  5. Lindo y mágico relato, todos necesitamos esperanza y abrir nuestros corazones. Te mando un beso

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  6. Muy bonito, parece una metáfora de la vida, la taberna es como el mundo.

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  7. great text....
    love to read it.... optimism.

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  8. Tu solución diaria11/23/2021 12:27 p. m.

    Es muy bueno tener información de estas cosas, pues si no tienes información de lo malo y lo bueno, no puedes defenderte, lo malo existe, como también existen muchas cosas mucho mejores que lo malo, tal y como muestras en la fotografía tan Maravillosa. Que por cierto por si no lo sabías hay muchas muy bonitas en Pixabay de pleno derecho, donde de momento no he encontrado ninguna restricción en ninguna imagen. GRACIAS.

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  9. Meus aplausos a este lindo conto!
    Seja qual for a situação devemos deixar que Deus ilumine o nosso coração .
    Que o amor, esperança e fé seja motivo de muitas luz em nossas vidas.

    Um forte abraço.

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  10. ¡Hola!
    Si tenemos esperanza, creo que nada puede resistirnos, o al menos, podremos lidiar con todo lo que se nos va poniendo en el camino, e inclusive no desistir a conseguir nuestros anhelos.
    No caigamos en la tentación, no nos vendamos por encontrar un camino más fácil, porque al final, se creemos en ello, lo logramos.
    Besotes

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  11. Maravilloso, la esperanza es la gasolina de todo lo que mueve nuestro mundo, existe lo bueno y lo malo, y contra ello nada podemos hacer, quizás elegir los atajos sea más complicado que vivir de manera más honesta y real, me encantó como siempre leerte Un abrazo

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  12. Curioso cómo de un momento a otro, pensando de nuevo hacia dónde quieres ir, decides afrontar tus inquietudes de otra manera, luz u oscuridad muchas veces dependen del prisma con el que se mire,bss!

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  13. Precioso, motivador y esperanzado relato. Un gusto pasar por acá. Saludos.

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Gracias a Pixabay por las imágenes

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