Se paró la tierra
La evolución es ese
cambio de actitud, ideas y sobre todo de conducta. A lo largo de los años el
humano fue evolucionando, creando y prosperando en su andar por la vida,
dejando legados la mayoría maravillosos a esas nuevas generaciones, tanto en
arte, música, arquitectura, tecnología. Hasta que llegó ese momento de cambiar
de conducta, la hora de vivir del cuento, de subsistir prendidos de un hilo, de
no tener ganas de avanzar, simplemente ocultarse y vivir una vida ficticia.
Se paró la tierra en el
momento que las relaciones personales dejaron de ser importantes, que el amor
era virtual, que comer era simplemente una necesidad. Los placeres del aire
puro se cambiaron por aires rancios de una habitación minimalista con ventanas
ocultas, y una sombra de lo que un día fue una persona, dormía y comía en una
silla frente a un monitor que era su única compañía.
Todo lo que existía tras
la pantalla era exactamente igual, con las mismas pretensiones, colgar una foto
filtrada hasta conseguir el efecto deseado, criticar o alabar el último post de
un desconocido, esbozar una sonrisa cuando los likes eran más de los esperados.
El mundo dejó de girar
cuando los comercios cerraron porque ya nadie salía a comprar, los bares
vendieron su stock al ver que a lo largo del tiempo las mesas no se ocupaban.
Las playas quedaron desiertas, porque ya nadie quería que los viesen tal y como
eran. Las estaciones y los aeropuertos eran estructuras que poco a poco se iban
cubriendo de vegetación. Los repartidores enfundados en un traje de cuero y
casco nunca se dejaban ver, simplemente corrían de un lado a otro entregando
pedidos.
La tierra se quedó
paralizada, cuando ya no nacieron niños, cuando los perros dejaron de salir a
hacer sus necesidades porque sus dueños se olvidaron de ellos, cuando los más
pequeños aprendieron a vivir en la oscuridad de una habitación sin ventilar.
Cuando los ancianos se consumían en una cama sin nadie que les llevase un vaso
de agua.
El mundo dejó de estar
vivo y se convirtió en un planeta muerto, y así fue como surgieron los
dinosaurios y todo volvió a comenzar.
Muy buen relato-reflexión. Y me quedé pensando... ¡Todavía falta la realidad virtual inmersiva! Hay una serie que se llama Los Cien (es de ciencia ficción), tiene varias temporadas y me las eché todas pues me gusta el tema aunque a ratos se pone densa. Recuerdo una escena donde hay mucha gente, todos sentados sin hacer nada pero viviendo en otra realidad gracias a la tecnología. Para ellos esa realidad inventada era la única verdad y hasta se mataban y no se daban cuenta que sus cuerpos estaban inmóviles en otro lugar. Creo que el futuro es bastante extraño. Gran relato, me gustó mucho.
ResponderEliminarBonito relato, la verdad es que nos da idea muy clara de lo que para muchos es la vida hoy en día, en donde ya nada es lo que parece y en donde quizás hemos perdido la idea de lo que realmente es importante.
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir este relato.
Es una entrada profética. De hecho, varias partes de la narración ya son, hoy, reales y palpables.
ResponderEliminarGenial relato y nos vamos a la extinción. Te mando un beso
ResponderEliminarMe gusto el relato te mando un beso.
ResponderEliminarFabuloso relato distópico, aunque cada vez más real. Muchas situaciones ya se atisban y tan sólo es cuestión de tiempo que sean realidad. ¿Por qué la gente no piensa, no actúa...? Gran reflexión nos plantea tu relato. Un fuerte abrazo, Mar!
ResponderEliminarGreat Post!
ResponderEliminarBjxxx
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we might be disappear sooner....
ResponderEliminarexcellent story....
Se me ha erizado la piel, en el estómago sentí unas punzadas y angustia en el pecho. Una realidad que ya estamos viviendo y me sentí inmersa en ella e incluso -es una confesión - un poco culpable. Nunca imaginé que viviríamos estás cosas pero el cuadro es realmente patético. Ya se ha dicho que todo acabará porque no habrá más niños (entre todas las cosas que se mencionan aquí).
ResponderEliminarMucho en que pensar, quiero mantener una ESPERANZA!
¿Puedo tener un dinosaurio de mascota? ¿O los últimos humanos serán las mascotas de los primeros dinosaurios?
ResponderEliminarBrillante.
Saludos,
J.
Todo es cíclico, desde eones...creo, que la vida ha comenzado y ha tenido su final. Lástima, que al parecer siempre la causa principal ha sido falta de amor.
ResponderEliminarTe dejo una cita (no sé de quien es) que le va muy bien a tu relato:
"Las personas fueron creadas para ser amadas, y las cosas fueron hechas para ser usadas. La razón por la que el mundo está en caos es, porque estamos amando las cosas y usando a las personas".
Buen relato, Mar.
Saludos:)
Que lindo relato amiga, realmente estamos tão necessitados de boas e verdadeiras leituras, que as vezes até esquecemos que a poucos meses a terra parou, e nós não sabíamos o que fazer!
ResponderEliminarTe desejo uma feliz semana.
Beijos
Me gusto mucho tu relato, me sentí casi como cuando comenzó la pandemia de covid, todos encerrados: hasta que de a poco nos fueron liberando .
ResponderEliminarMuy imaginativo tu relato, porqué no puedo haber sido así, y la rueda volvió a girar, saludos, PATRICIA F.
nowadays there are so many potencial disaster because of humankind...
ResponderEliminarConclusión: el mundo está medio muerto, aunque no por lo que solemos pensar que es lo más evidente (contaminación) sino por la forma de relacionarnos o de no hacerlo, de ese aislamiento que creamos, ese ir a nuestra bola...da qué pensar,bss!
ResponderEliminarSuena triste y hasta escalofriante pero es ya una realidad, la convivencia ha cambiado mucho desde que apareció la tecnología y más cuando llegaron las redes sociales, se siente más después de la pandemia, parece que no hay vuelta para atrás.
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