Y llegó la felicidad
Él llegó a su vida y desordenó
todo lo ordenado, abrió los cajones de su alma y desperdigó sentimientos por
todo su cuerpo. Desgarró un corazón apretado haciendo que latiese con solo verle.
Descubrió en poco tiempo que el orden no perduraba, que cuando llega lo que se
conoce como felicidad, todo se vuelve del revés, uno comienza a realizar
acciones que jamás hubiese pensado, a reír por nimiedades, a llorar, por no
poder parar de ser feliz.
Él llegó y se instaló de tal
forma que estaba segura de que ya nunca podría echarle, impuso su presencia en
una vida forjada en la soledad, abrió las puertas de una piel apagada, erizó el
vello en partes que ni se había fijado que existían.
Ella dejó que él entrase, no
sin antes desmoronarse tras el gran descubrimiento de una sensación
desconocida. Una palabra que jamás usaba, en la que nunca reflexionaba, podía
intuir que existía, al ver como los escritores la utilizaban en sus novelas, en
sus poesías, en sus escritos. La notaba flotar en parejas que paseaban por la
calle, en el cine. Sin embargo, creía que era una palabra inventada para
personas como ella, solitarias, esas, que ellas mismas se abandonaban
imaginando que si la felicidad existía, era la forma en que vivía.
Cuando él llegó, esa palabra
tomó otra forma, salió a la luz la vida que ofrecía, se materializó en una
realidad inesperada, se volcó en darle la vuelta a un cuerpo menudo que durante
años se había olvidado de florecer.
Él regó de nuevos momentos,
sensaciones, acciones, cada poro de piel de una mujer que se dejó llevar por
todo lo que él le hacía sentir. Aprendió a corresponder, a devolver todo
aquello que recibía, a unirse a la felicidad encontrada.
¿Cuándo duraría?, era
imposible saberlo, de lo que si estaba segura es que jamás dudaría de la
palabra “Felicidad”, durase mucho o poco, nunca más cuestionaría su existencia.
Qué bonito, una historia donde la felicidad hace su entrada triunfal en la vida de alguien. Me ha gustado mucho, una excelente lectura para el día que empieza acá en México. Saludos.
ResponderEliminarLa felicidad llega cuando menos lo esperas. Muy bonito escrito. Saludos
ResponderEliminarProsa enredada en poesía, para un poema capaz de lograr entre sus personajes el justo cóncavo y convexo del amor. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarMuitas vezes, precisamos de muito pouco para ser felizes!
ResponderEliminarO teu texto é delicioso. Gostei muito!
Te dejo un beso.
que bonito mis felicitaciones
ResponderEliminarhappiness is essential in life....
ResponderEliminargood story
Genial relato uno debe amar y vivir con plenitud. Te mando un beso.
ResponderEliminarGenial relato. Hay que amar con plenitud y vivir la vida asi. Te mando un beso. https://enamoradadelasletras.blogspot.com/
ResponderEliminarPre - cio - so!!
ResponderEliminarMar, Mar! Más lindo, imposible. Te sublimaste.
ResponderEliminarÉl desordenó lo ordenado, abrió los cajones de su alma!
Un canto de esperanza.
Precioso, me encantó. Un gran abrazo ❤️🌹❤️🌹❤️🌹❤️🌹
Ojalá la felicidad llegara donde todavía no ha llegado. Pero quién sabe...
ResponderEliminarBuenos días, Mar.
ResponderEliminarPreciosa palabra FELICIDAD y preciosísimo relato.
Has plasmado maravillosamente todas las sensaciones que se sienten al enamorarse. Esos primeros instantes que luego se van difuminando poco a poco, pero que nunca se olvidan.
FELICIDADES para ti. Me encantó.
Un abrazo.
so incredible story..
ResponderEliminarHola, precioso relato y preciosa manera de demostrarnos que la felicidad existe, aunque a veces se muestre algo esquiva.
ResponderEliminarBesos desde Promesas de Amor, nos leemos.
Hola, creo que es un relato bonito, verdaderamente cuando se habla de felicidad creo que es importante recordar que a pesar de todo siempre en la vida vamos a tener esos momentos de felicidad ya sea poca o mucha, de verdad que me gusto mucho este relato.
ResponderEliminarSaludos desde Kiwybooks!
No importa lo que dure disfrutar el momento es lo importante
ResponderEliminarEs verdad, se suele pensar que la felicidad es la que se tiene, la que se vive...Solo el amor puede abrir las puertas de esa otra felicidad escondida en cada sensación. Hermoso relato, Mar, nos dejas ver el "abandono" la creencia en algo que no se ha visto ni sentido de verdad, pero por fuerza ha de existir pues así lo proclaman otros. Y la llegada de ella para el tiempo necesario.
ResponderEliminarPero que bien se te dan los relatos.
Un abrazo, y buen finde:)
Después de momentos complicados, se aprecia más la felicidad cuando llega...
ResponderEliminarNice Post
ResponderEliminarThanks
Volto para te reler. Ler-te é sempre um doce fascínio!
ResponderEliminarUn buen fin de semana.
Abrazo!
Hoy el registro es diferente, y me ha encantado. Qué precioso texto de prosa poética. No puede describirse mejor lo que es la felicidad. Enhorabuena!
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarConfieso que me esperaba un giro de los tuyos al final jejeeje.
Aunque nos dañen, nos caigamos una y mil veces, nos hundamos... no debemos jamás de los jamases no creer en que la felicidad existe.
Está en esos pequeños momentos del día que nos sacan una sonrisa, en esos mensajes sin venir a cuento que nos preguntan como estamos, y como no, en esas personas que de un modo u otro hacen que tus sentimientos se expandan y que todo sume.
Como siempre, un placer leerte.
Besotes
Me ha encantado el relato, sin duda, la feliciidad existe, hay que saber buscarla en momentos, sonrisas y amor . Cuando hay momentos durosy llega la luz, se aprecia más la felicidad,. Enhorabuena, a seguir escribiendo.
ResponderEliminarAcostumbrada a que siempre les pase algo a tus personajes, esta vez has sido buena y su vida ha ido a mejor y cambió su percepción de la felicidad, ya que lo que ella podía sentir antes también lo era, pero después adquirió un matiz que la llenaba mucho más,bss!
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